Cubiertas antialgas

La proliferación de algas en los embalses es un problema común que puede afectar a la calidad del agua y aumentar los costes de mantenimiento. Las cubiertas antialgas ofrecen una solución práctica y eficaz, ya que protegen el contenido del depósito de la exposición directa a la luz solar, que es uno de los principales factores de crecimiento de las algas.

Además, estas cubiertas ayudan a reducir la evaporación, mantienen más estable la temperatura del agua e impiden la entrada de residuos externos. Están diseñadas con materiales muy duraderos y resistentes a las condiciones climáticas más adversas, lo que garantiza una solución a largo plazo para diversos sectores, como la agricultura, la industria y los municipios.

Invertir en cubiertas antialgas no es sólo una forma de reducir los costes de explotación, sino también de proteger un recurso esencial: el agua.